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| . Juana Sánchez |
Dado que esta temporada ciclónica amenaza con ser activa y complicada por la evolución de la pandemia del coronavirus. Pedimos a las autoridades y las comunidades vigilancia y cumplimiento de las instrucciones de los organismos de protección civil, en pro de salvar vidas, proteger bienes y propiedades.
Cada año, tomamos las previsiones correspondientes, esta vez, las autoridades deben tomar en cuenta que la prevención y planificación será distinta, debido a la necesidad de destinar albergues especializados para los enfermos diagnósticados con COVID-19, y, así; evitar la propagación de la pandemia.
Inmersos ya en la temporada ciclónica en el Océano Atlántico y en el Mar Caribe, necesitamos estar alertas, informados y preparados con el fin de evitar que estas perturbaciones atmosféricas, ocasionen daños a personas y bienes.
Estos fenómenos representan una amenaza para el país, debido a las lluvias, desbordamientos de ríos, arroyos, cañadas, inundaciones repentinas, deslizamientos de tierra, caídas de árboles y daños a viviendas que provocan y nos obliga a estar capacitados para resistir los embates, y, tomar las medidas apropiadas a cada momento.
Recomendamos establecer protocolo dirigido a las comunidades en peligro, en el que se incluyan las medidas siguientes:
1- Disponer refugios aislados, especializados para enfermos de COVID19 vulnerables por vivir cercanos a ríos y cañadas.
2- Ubicar y enlistar embarazadas, enfermos, adultos mayores, impedidos y convalecientes, en refugios adecuados, seleccionados en cada área o sector.
3- Ubicar y revisar los refugios del área que han servido tradicionalmente como tales.
4- Hacer listados con teléfonos y direcciones, ponerlos en grupo de WhatsApp segmentarlos por categorías, autoridades, comunitarios, con la finalidad de mantener comunicación fluida.
5- Hacer brigadas para limpiar techos, asegurar tinacos y cualquier objeto que pueda tumbar el viento.
6- Instar a los vecinos a revisar las condiciones de instalaciones de gas, eléctricas, inversores y baterías.
7- Disponer de recipientes para almacenar suficiente agua.
8- Exhortar a los vecinos a hacer su propio plan familiar. Es importante resaltar las juntas de vecinos, organizaciones comunitarias del sector, tales como: clubes culturales, clubes deportivos, organizaciones de motoconchistas, asociaciones de padres, madres y amigos de la escuela.
9- Sugerir ubicar familiares donde quedarse en caso de vivir en un área vulnerable o de evacuación.
10- Proveer mascarillas y artículos de desinfección en los centros.
Los organismos de socorro deben integrar en cada comunidad a las juntas de vecinos, clubes culturales, clubes deportivos, las asociaciones de padres y madres amigos de la escuela, involucrar a la comunidad para que sea artífice de su propio cuidado y seguridad.
Poner en ejecución los programas y acciones que manda el Plan Nacional de Reducción de Riesgos cuyo objetivo concreto es la reducción, previsión y control de los factores de riesgo, amenazas y vulnerabilidades en República Dominicana tomando en cuenta la emergencia sanitaria.
Lic. Juana Sánchez
Titular de la Secretaría de Asuntos Comunitarios
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